Por ANA LUCÍA ORTEGA (texto y fotos) ©
No lo es, porque cada día es único y especial.
Amanece y nos pondremos en marcha. Dependiendo de las circunstancias de cada persona, la jornada podrá ser más o menos productiva, feliz, inquietante; más o menos trascendente. Lo inequívoco, es que la llegada del alba nos premiará con un día más de vida. Y eso es un derecho inalienable de todos los seres vivos.
No pretendo filosofar. Lo que ahora me viene a la cabeza es la idea —arraigada en el presente— que dicta, que «la filosofía no sirve para nada». Un filósofo nos hace concebir a alguien que peina canas, un pensador recluido en una habitación rodeado de tomos y tomos de libros —por supuesto, encuadernados— perteneciente a la sofística o a la dialéctica... A saber.
Lo curioso es, que la filosofía está con nosotros, nos acompaña a lo largo de todo el día y rige nuestros silencios y nuestros bullicios. No es tangible, pero existe. Compartimos las frases en las redes sociales, con tipología moderna y multicolor, en algunos casos, sin saber siquiera de dónde han salido. Algunas son obra de Platón, Aristóteles, Séneca o Cicerón; otras proceden del pensamiento y la pluma de escritores que trascendieron; y las hay que nacen de la sabiduría popular, y del sentido crítico, de los veedores sociales más duchos en el oficio de vivir. Quizás, porque la filosofía es la suma de dos poderosísimas palabras: amor y sabiduría.
«Un buen mapa es aquel que tú entiendes y te sirve para tu viaje. Aunque para otros, sea indescifrable».
De modo que, en nuestra contemporaneidad, cuando compartimos frases sin saber de dónde han salido —admito que solo en algunos casos para no exagerar— y llenamos nuestras mañanas, tardes y noches, de palabras y enunciados con sentido, nos llega la oportunidad de acoger el volumen Contrapensamientos, el nuevo libro del escritor Emilio Porta, un gran amante de la poesía que se pasea con facilidad y genialidad, por otros géneros literarios, dejando siempre una estela que incita a ser seguida.
«Conseguir objetivos es un autoengaño necesario. Pero los objetivos ponlos tú, no permitas que te los señalen».
Contrapensamientos (Ediciones Atlantis, 2018) fue presentado al público en febrero, en la sede de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles (AEAE) en Madrid, con una gran afluencia de público que colmó el angosto salón principal de la histórica institución.
La ceremonia fue presentada por José López Martínez, secretario general de la asociación, amenizada por la pareja de escritores Soledad Serrano Fabre y Enrique Gracia Trinidad, el editor J.D. Álvarez, y el propio autor, Emilio Porta, quien leyó una carta del Presidente de la AEAE Juan Van-Halen que no pudo estar presente.
La Asociación de Corresponsales de Prensa Iberoamericana (ACPI) a cuya junta directiva pertenezco, estuvo presente en el evento, como parte de nuestro compromiso de apoyar todas las manifestaciones artísticas de profesionales de la comunicación y el arte en general.
«Algún tipo de literatura solo es vanidad. Y algún tipo de filosofía. Aunque a veces, aún con ella, el autor pueda ayudar a los otros».
Contrapensamientos está compuesto de dos partes. Además de la introducción, escrita por el propio autor, contiene frases de filosofía práctica, de fácil y rápida lectura, en lo que constituye aproximadamente el 80 porciento del libro; mientras, la segunda parte consta de veintitantas reflexiones algo más extensas, aunque también brevísimas, para ayudar a pensar, según palabras de su creador en el día de la presentación.«Teniéndolo en vuestras manos, —refirió Porta— me tendréis un poco a mí y tendréis un diálogo conmigo. Es lo que hacemos cuando leemos un libro, estamos hablando con el autor y estamos adquiriendo algo de él. (...) Solo soy un escritor que piensa y quiere ayudar a pensar».
Personalmente, creo que éste es un perfecto libro de cabecera. Puede hojearse y consultarse hasta la saciedad, porque siempre nos mostrará aquello que necesitamos ver y que, a simple vista, no conseguimos distinguir. Es una magistral simbiosis de nuestra conciencia con los consejos maternos, y las moralejas de aquel profesor que nos marcó una vez en la vida, y no borraremos nunca de nuestra memoria. Porciones del todo y de la nada. Lo inexplicable. Lo intangible. Emociones vitales. Filosofía de la vida. La respuesta a muchas preguntas.
Y, sin embargo, ya nadie estudia filosofía.
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| Izda: Ana Lucía Ortega Dcha: Emilio Porta |
Las frases incluidas en esta entrada, pertenecen al libro de Emilio Porta, disponible para su venta en la página de su editorial, Casa del Libro y varias plataformas digitales
Sobre Emilio Porta
Madrileño. Escritor. Filósofo. Licenciado en Derecho y Económicas. Literatura (Inglaterra y Estados Unidos) Crítico de cine. Autor del nombre del AVE (tren de alta velocidad español)
Libros publicados: "Compás de Espera" "Anamarel" "Porlock" "Travesía de Alfama" "Diario Despertar" "Tomo Secreto" "Destinos y Caballeros" "Corales" (Premio Blas de Otero 2009) y otros (Poesía, Narrativa, Ensayo). Actualmente es Vicesecretario de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles, Vicepresidente de la Asociación Escritores en Red (EnR) y Director General y fundador de la plataforma digital literaria Netwriters (NW).
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